fbpx

Trauma relacional: Prevención, educación y capacitación

Center for Community Solutions es una organización sin ánimo de lucro cuya misión es acabar con la violencia sexual y de pareja actuando como catalizador de comunidades solidarias y de la justicia social. Sus programas de prevención utilizan la educación como herramienta para romper el ciclo de la violencia y prevenirla antes de que se produzca. CCS cree que la violencia se puede prevenir: la violencia es un comportamiento aprendido y, por tanto, se puede desaprender. En general, sus programas de prevención se esfuerzan por dotar a los participantes de las habilidades y herramientas que necesitan para prevenir la violencia en sus relaciones y comunidades. Más información aquí.

Karla Sánchez es una terapeuta matrimonial y familiar licenciada en el Centro de Soluciones Comunitarias. Le hicimos algunas preguntas sobre el trauma, las relaciones y la curación como un recurso para usted o un ser querido.

¿Cómo define el trauma en términos de relaciones y violencia sexual?

El trauma es la respuesta normal del cuerpo a acontecimientos anormales, y a menudo los síntomas pueden explicarse en términos biológicos. En este contexto, las personas experimentan abusos en forma de agresión sexual y/o violencia de pareja. Las respuestas al trauma pueden ser diferentes para cada persona, ya que su forma de afrontarlo, sus recursos internos y su sistema de apoyo pueden diferir. Mientras que algunos experimentan un gran deterioro en su vida cotidiana, como pérdida de sueño, gran ansiedad e hipervigilancia, o síntomas depresivos, otros sólo notan el impacto cuando se habla específicamente del trauma o se desencadena. Es importante señalar que el trauma en estas victimizaciones puede ocurrirle a cualquiera, independientemente de su edad, sexo, género y/o estatus socioeconómico. El trauma es un problema de salud pública que afecta a todos los miembros de la comunidad.

¿Es fácil identificar las relaciones sanas, insanas y abusivas, especialmente cuando estás en una? ¿Cómo se identifican?

Las relaciones de maltrato no siempre son fáciles de identificar, sobre todo cuando se está dentro de la relación. Las víctimas de malos tratos pueden tardar meses o incluso años en reconocer el maltrato en su hogar o en su relación. Las dinámicas sanas se identifican más comúnmente cuando las personas informan de sentimientos continuos de seguridad, validación y comunicación efectiva. Por el contrario, una relación insana o abusiva puede causar a las víctimas altos niveles de estrés, miedo y una sensación constante de inseguridad o de estar caminando sobre cáscaras de huevo. Además, si la violencia se intensifica, la gente puede darse cuenta entonces de que sus límites físicos, emocionales y psicológicos están siendo violados constantemente. Puede tratarse de empujones, pellizcos, minimización de sus sentimientos y gaslighting. A menudo, el maltrato emocional, verbal y económico se minimiza y se oculta, a pesar de que también son formas de maltrato. 

¿Cómo establecer límites sanos en las relaciones?

Los límites son un componente crucial de las relaciones sanas. Los límites empiezan en uno mismo y en la toma de conciencia de uno mismo. Los límites se definen en función de lo que significan para el individuo y de lo apropiados que sean en un entorno determinado. Estos límites también pueden verse influidos por factores culturales, como la familia y la comunidad. Los límites saludables se establecen mejor al principio de la relación, abriendo una conversación para hablar de intereses y expectativas. Los límites saludables también conllevan una consecuencia si se violan, y a menudo son difíciles de hacer cumplir en las relaciones abusivas.

¿Hay comunidades más vulnerables a sufrir traumas en las relaciones?

Una de las mayores ideas erróneas sobre la violencia en la pareja es pensar que una comunidad específica es más vulnerable que otra. Según mi experiencia, diría que todas las poblaciones y comunidades corren el riesgo de sufrir violencia en una relación. Sin embargo, el grado de violencia y el proceso de curación pueden ser diferentes para cada uno. Ciertas variables como el estatus socioeconómico, el género, la etnia y la raza pueden permitir que las personas tengan un mejor acceso a la atención médica y/o al apoyo de las fuerzas del orden. No obstante, la violencia de pareja puede darse en todas las comunidades y en personas de cualquier sexo y edad.

¿Tienes alguna recomendación para intervenir de forma segura cuando alguien que conoces mantiene una relación insana?

Se recomienda evaluar la disposición de la persona a hablar de los malos tratos en su relación, o incluso a admitirlos. Lo más importante es conocer a la persona en el punto en que se encuentra en su proceso. Si notas que la persona está abierta y dispuesta a mantener una conversación sobre su situación, puedes empezar preguntándole cómo puedes serle de ayuda o qué necesita de ti en ese momento. Algunas víctimas no están interesadas en dejar la relación, debido al miedo, a las dificultades económicas o a otros innumerables factores. Por lo tanto, es crucial convertirse en una persona de apoyo o un aliado, en lugar de ofrecer consejos no solicitados que puedan alejarlas. Basta con estar ahí, escuchar y validar sus sentimientos.

¿Cuál es el punto de partida para curar un trauma? ¿Es diferente para cada persona?

La recuperación del trauma es diferente para cada persona y cada una puede tener un punto de partida distinto. El paso más importante hacia la curación es evaluar la preparación y la voluntad de iniciar el viaje. Está bien tomarse su tiempo hasta que esté preparado para pedir apoyo para la curación. Muchas personas también dan diferentes pasos aparte o además de la terapia, como la lectura, la formación, los talleres o la iglesia.

Dicho esto, uno de los puntos de partida que considero con mi población bicultural es el impacto de la lengua, la educación y la cultura en su proceso de curación. La cultura desempeña un papel importante en la recuperación de la violencia. Hacer preguntas abiertas, tener un enfoque cultural humilde de sus historias y utilizar un lenguaje con el que se sientan cómodos es crucial para proporcionar servicios informados sobre el trauma.

¿Existen técnicas preventivas que puedan adoptarse para reducir la posibilidad de traumatismos para las generaciones futuras?

La educación es clave para prevenir los malos tratos. Cuando educamos a nuestras comunidades y familias, aumentamos sus conocimientos y su concienciación sobre el aspecto que puede tener el maltrato, las señales de alarma y el ciclo de la violencia. Además, las personas también aprenden formas de aumentar su seguridad, los recursos de apoyo disponibles y cómo reducir el riesgo de revictimización. Disminuir el estigma del acceso a los recursos de salud mental es esencial para la prevención, si la gente se siente cómoda y confiada al entrar en una consulta de terapia, la esperanza, la curación y el apoyo son posibles. 

Acerca de Karla Sánchez

Karla Sánchez es una licenciada en terapia matrimonial y familiar (LMFT) que comenzó su trabajo en CCS como estudiante de práctica en 2016 y regresó a la agencia como personal en 2018. Karla trabaja en la oficina de El Cajón, ofreciendo servicios a clientes en inglés y español a víctimas de Asalto Sexual y Violencia de Pareja Íntima. Karla también tiene experiencia como terapeuta licenciada en México y se unió al campo de la salud mental en los Estados Unidos en 2012. Karla también ha trabajado como administradora de casos para familias involucradas en el sistema de tribunales juveniles, asistiendo a jóvenes en centros de detención juvenil y trabajando como terapeuta con menores en riesgo de explotación sexual y trata de personas. Karla ha dedicado su carrera a la prestación de atención informada trauma a la comunidad, y es un apasionado de los servicios folx que encuentran barreras para el apoyo y los servicios.

×